Published on enero 19th, 2018 | by Daniel Pimentel
No Cross No Crown, regresa Corrosion of Conformity
Uno de los lanzamientos más esperado en 2018 para mí fue sin duda No Cross No Crown de Corrosion of Conformity, esta ya legendaria banda de sludge/southern metal que quizá no sea tan reconocida a nivel mundial como otros grandes del género, pero que sin duda tiene lo suficiente para colocarse en la cima, y esto no lo digo sólo porque sí, sino que se debe en gran medida a que la banda no ha grabado un solo disco que digas “que basura de disco”, aunque eso sí, hay unos mejores que otros, pero vayamos a lo que nos concierne.
- Quizá te interese: El Stoner Rock: Los sonidos del cosmos desde un amplificador
Después de las primeras tres canciones que sirvieron como preámbulo a No Cross No Crown, uno ya podía vislumbrar de lo que iba este álbum, sin embargo aún faltaban piezas del rompecabezas para poder comprender lo que sería este décimo trabajo discográfico de la banda, y finalmente este 12 de enero tuvimos todos los elementos para formarnos una opinión adecuada -aunque no completamente, ya que con el tiempo encuentras más detalles- de él, que en mi caso sería ¡Discazo!
No Cross No Crown es un álbum bastante consistente que retoma en buena parte el sonido de In the Arms of God (2005), aunque además rescata algunos elementos de sus trabajos de mediados de los 90’s, principalmente Deliverance (1994) aunque también hay algo Wiseblood (1996) entre líneas. Por cierto que estos dos álbumes anteriores están clasificados por algunos los fans como los mejores de la banda, aunque de sobra sabemos que esto es bastante subjetivo, pero en fin.
En este disco tenemos una vez más la oportunidad de escuchar a Woody Weatherman y Pepper Keenan tocar esos los poderosos riffs sureños cargados de una oscurecida influencia del sonido de Black Sabbath, además de que Keenan también retoma su puesto como vocalista de la banda; todo esto viene además acompañado de la frenética batería de Reed Mullin y el poderoso bajo de Mike Dean. Esta formidable combinación cae de maravilla después de sus dos materiales anteriores, -el homónimo de 2012 y IX (2014)- que francamente estuvieron bien, pero que rompían con ese sonido noventero, ya clásico de COC.
En sí, No Cross No Crown es un trabajo bastante duro aunque se toma su tiempo, no te avienta nada de golpe y va creciendo con su ritmo, COC regresa a la dinámica de intros y además incluye algunos temas más tranquilos pero bastante potentes, lo que dota al álbum de muchos matices, además, claro, de la energía necesaria para un buen rato de headbanging.
Ahora bien, en cuanto a las pistas hay algunas bastante interesantes, entre mis favoritas puedo resaltar los tres sencillos previos que son The Luddite, Cast the First Stone y Wolf Named Crow, mismas que curiosamente son los tracks 2,3 y 5 del álbum, por lo que quizá sea un poco más familiar el escuchar el disco desde un principio, además de otros muy buenos temas como Nothing Left to Say, A Quest to Believe (A Call to the Void) y Son and Daughter.
La única “queja” que se me puede ocurrir sobre este material es la duración, el álbum como ya lo comenté es buenísimo, pero son sólo 31:26 minutos que se te pasan en un parpadeo, sé que puede sonar un poco frívolo, pero es que de verdad te quedas con muchas ganas de escuchar más de Corrosión of Conformity y este nuevo trabajo.
Portada: http://www.blabbermouth.net