Published on noviembre 3rd, 2017 | by Esencia de Antes
Satyricon estremece el C3 Stage
Al punto de las 8 de la noche del 31 de octubre, la banqueta que lleva hacia el C3 Stage ya se veía abarrotada con varias decenas de fieles adeptos a la espera de Satyricon, la legendaria banda noruega. Algunos usaban disfraces, y aunque en su mayoría el público femenino era quien los portaba, la escena quedaba completa junto a la manada de «desequilibrados», «zarrapastrosos», greñudos y barbones que adornaban el cruce de las avenidas Vallarta y Chapultepec, eran aquellos los que se robaban las miradas de cualquier pobre incauto que osaba transitar cerca de ese cuadro digno de una noche de brujas.
El ingreso estaba estipulado a las 8 pm, pero como ya es mala costumbre en nuestra bella ciudad, el acceso fue permitido alrededor de las 8:30 pm. Hubo una sorpresa que no muy trascendente pero sí jodió un poco; antes de comenzar se dio la noticia de que una “tal banda” -que nunca estuvo anunciada-, canceló su participación como telonera del épico show en cuestión, lo que me pone a pensar en ¿Quién en su sano juicio rechazaría tal oportunidad?, supongo que independiente de las razones que tuvieran, la duda simplemente quedara en el aire y pasará al inevitable olvido. En fin, el show debía continuar.
Debido a la cancelación repentina de esta «misteriosa» banda, tuvimos que esperar una tortuosa hora más dentro de la cueva del infierno llena de gente, humo, sudor, fluidos y una agresiva euforia. Sin embargo todo eso quedó de lado cuando por fin pudimos escuchar el seductor sonido de las bocinas anunciando a Satyricon, que después de una introducción apocalíptica dieron comienzo al evento con Midnight Serpent, canción que bautiza Deep Calleth upon Deep (2017) su álbum más reciente.
El ansioso público rápidamente se estremeció y demostró su respeto a los noruegos levantando los puños al ritmo de los devastadores pies de Frost. La cerveza y el sudor dominaban el ambiente mientras que las largas caballeras agitaban el escaso aire que había en el lugar, al mismo tiempo, Satyr seguía incitando la demencia de los tapatíos. Así se fue desarrollando la tan esperada noche de black metal que nos ofreció ACK Promote en su denominada “Horror Week”, que también incluye el concierto de Septicflesh con Fleshgod Apocalypse.
- Quizá te interese: Los dioses de la violencia sacuden el C3 Stage
Más tarde hubo un pequeño inconveniente con el micrófono de Satyr, el cual se solucionó rápidamente, por lo que no tuvimos más problemas en disfrutar de un variado repertorio de canciones como Crow, Commando, Walker Upon The Wind, títulos que mantenían al numeroso séquito en un trance de oscuridad, entre la furia y la calma, como una perfecta dualidad, subiendo los ánimos y asesinándolos.
Entre canción y canción se podía observar como todos entraban en un estado contemplativo, al punto que cualquier neófito pensaría que el público simplemente estaba aburrido, pero era todo lo contrario, las personas estaban embelesadas con cada nota; aunque eso rápidamente cambio en cuanto el aclamado himno de Satyricon se hizo presente, ¡Sí, Mother North se manifestó! Y junto con ella lo hicieron también cientos de voces que acompañan la épica melodía.
Sin embargo, lejos de este épico instante, para mí el punto culminante de la noche fue ese momento en que Satyr subió al escenario con una guitarra para unirse a sus compañeros en Pentagram Burns, la antepenúltima canción del evento, ya que a partir de ese momento la energía y la adrenalina ascendieron nuevamente dando un segundo aire al ya agonizante concierto.
Casi al final de la noche, Guadalajara ovacionó a la leyenda noruega con el ya clásico y bien conocido cántico entonado por cualquier mexicano cuando algún concierto está por finalizar. Fue aquí cuando Satyricon regresó para cerrar el show con K.I.N.G y después un largo discurso de Satyr todos volvimos a levantar nuevamente los puños, concluyendo una noche memorable.
Texto: Këtzer Tod